Los juegos de la IA

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Por primera vez, los juegos olímpicos harán una aplicación intensiva de la IA en la competición deportiva, las retransmisiones y la seguridad.  Se deduce un mensaje: sin inteligencia artificial, el éxito no es posible

 

Deporte y tecnología se van a fusionar en los juegos de París como nunca antes lo habían hecho. En la Agenda IA que el Comité Olímpico Internacional presentó a bombo y platillo en abril, algo inédito en su historia, se desprende que la inteligencia artificial ha adquirido carta de naturaleza como elemento indisociable de la alta competición deportiva.

¿Cuáles son los principales hitos de ese maridaje tecno-deportivo? Veamos algunos ejemplos.

Entrenamiento. En la preparación de los deportistas de élite hace tiempo que se han introducido sensores y medidores de rendimiento. Ahora los algoritmos también diseñan planes personalizados de preparación, detectan riesgos de lesiones o personalizan la rehabilitación.

Por ejemplo, es posible identificar que un jugador de baloncesto ejerce una mayor presión en una de sus piernas al saltar haciendo que sea más propenso a lesionarse debido al estrés acumulativo. Para contrarrestarlo, la IA puede sugerir ajustes en la técnica de salto para equilibrar el movimiento y reducir el riesgo de lesiones.  (Nobbot)

Entrenando tenis de mesa con un doble digital. Imagen: COI

– La Liga de Fútbol Americano (NFL) utiliza una tecnología capaz de medir el daño que recibe un deportista tras sufrir una caída o un golpe. Esto ayuda a su equipo a generar planes de recuperación personalizados y a medir la gravedad del daño. Es probable que algunas selecciones la usen en París.

Intel lleva años depurando una tecnología denominada 3D Athlete Tracking (3DAT) que crea una réplica digital de un deportista para que los entrenadores analicen el movimiento preciso de sus atletas y detecten los mínimos detalles a corregir. En París estará presente.

 

Arbitraje. Los sistemas de cronometraje y medición a base de sensores se completan ahora con sistemas de visión por ordenador que refuerzan el criterio de los jueces o incluso llegan a sustituirlos, como ya prácticamente está ocurriendo en la gimnasia. Un sistema de IA desarrollado por Fujitsu evaluará los ejercicios en todos los aparatos.

Fujitsu

Aunque los árbitros humanos tienen la última palabra, la precisión que ofrece la tecnología les convierte en certificadores de lo que apuntan las máquinas. La calidad técnica de las piruetas gimnásticas o de los saltos de trampolín, el impacto de las espadas en el cuerpo de los esgrimistas, la salida y la llegada de corredores o nadadores, la medición de los tiros, saltos y lanzamientos… todo lo miden las máquinas con una precisión inabarcable para el ojo humano.

 

Retransmisiones. La señal oficial de televisión incorporará sistemas de repetición de jugadas con IA en doce competiciones como vóley playa, tenis, judo y rugby. El sistema permitirá ver las repeticiones con mayor detalle al insertar fotogramas generados por inteligencia artificial entre cada fotograma real así como reproducir imágenes virtuales en 3D que simulan todos los ángulos de visión. 

– La captura de datos de las competiciones no se limitará a la representación gráfica de los tiempos y puntuaciones. Nuevas funciones algorítmicas permitirán prever el resultado final a medida que avanza la prueba o el partido. 

– La cadena norteamericana NBC dispondrá de un presentador generado por inteligencia artificial. Peacock, la plataforma de streaming del grupo, emitirá resúmenes diarios con la voz de Al Michaels, legendario locutor deportivo de la NBC.

-Los resúmenes oficiales que proporciona la televisión oficial de los Juegos se personalizarán para cada país en función de sus atletas pero también utilizando tecnología de reconocimiento de emociones como hace IBM en el torneo de tenis de Wimbledon desde 2017. El griterío, los aplausos o las celebraciones determinan los pasajes que se seleccionan. 

Fuente. COI

Seguridad y control. El mayor despliegue de inteligencia artificial se hará en seguridad y control.

-La policía francesa lleva meses probando sistemas de vigilancia con inteligencia artificial en estaciones de tren, conciertos y partidos de fútbol. Durante los juegos estos sistemas escanearán a la población y a los visitantes de  París, verificarán si hay paquetes abandonados, personas en zonas prohibidas o que se muevan a contracorriente de la multitud, y detectarán armas, objetos sospechosos, indicios de incendio, etc… Aseguran haber renunciado al reconocimiento facial.  

-El Comité Olímpico Internacional implantará sistemas automatizados para bloquear contenidos abusivos en las redes sociales que atenten contra la dignidad de los atletas. Concurrirán más de 10.000 y se espera que se generen más de 500 millones de interacciones en las redes sociales. 

-También hay temor a las campañas de desinformación vinculadas al Kremlin o a grupos prorusos. El Microsoft Threat Analysis Center lleva meses monitorizando algunos de esos actores y ayudando a desmentir las campañas de bulos que se publican en las redes para desacreditar los juegos o para esparcir el temor a supuestas amenazas terroristas. 

 

Efectos que se intuyen

En todos los juegos olímpicos hay motivos para destacar los hitos alcanzados, tanto deportivos como organizativos. Este año, uno de los hitos será el tecnológico. Se intuyen ya algunas consecuencias.

Despliegue de la IA analítica. Más allá del auge de la IA generativa que hoy lo inunda todo, en el deporte de alta competición la inteligencia artificial avanza en el ámbito analítico y predictivo. La inteligencia analítica no hace tanto ruido mediático como la generativa pero es la que realmente está penetrando con más fuerza en las organizaciones. Los juegos lo demostrarán.

-¿A salvo de la IA generativa? A diferencia de lo que ocurre en otros ámbitos, por ejemplo el creativo, la práctica deportiva parece a salvo de la IA generativa. La ejecución se reversa a las personas. No hay robots compitiendo, ni asistentes IA incrustados en el organismo de los atletas. Sin embargo, la IA generativa se empieza a colar en la representación masiva del deporte. La percepción global se consigue a través de las retransmisiones. La mayor audiencia se congrega en los medios. En los estadios asiste muy poca gente en comparación con el público que sigue las competiciones por televisión. En la medida que la IA generativa  se incorpore a las retransmisiones y abra la puerta a la virtualización de lo real, la percepción del deporte puede cambiar.

La seguridad lo justifica casi todo. Ante el riesgo de incidentes y la dificultad de controlar a las multitudes, los sistemas de inteligencia artificial proporcionarán un nivel de control al que las autoridades no renunciarán aunque bordeen la legalidad y preocupen a las entidades vigilantes de los derechos humanos.

El camino a seguir. Los atletas son un referente. Un modelo. Siempre lo han sido. Sus hazañas o fracasos alientan o deprimen el ánimo de todo un país. Marcan el camino a muchos niños y jóvenes que sueñan en ser, algún día, héroes aclamados. Los valores que transmite el deporte orientan a muchos ámbitos de la sociedad. En París ocurrirá lo mismo, pero, además, inculcarán un aprecio incondicional por la tecnología en general y por la IA en particular, y reafirmarán por los menos dos convicciones: que la justicia y el arbitraje es mejor automatizarlos y que sin inteligencia artificial el éxito no es posible.

Joan Rosés

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