Empresas y organizaciones funcionan como si el futuro fuera previsible. No lo es. Deben adaptarse a la incertidumbre, a la interacción permanente y aprender de la teoría del caos…
Empresas y organizaciones funcionan como si el futuro fuera previsible. No lo es. Deben adaptarse a la incertidumbre, a la interacción permanente y aprender de la teoría del caos…